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domingo, 27 de noviembre de 2011

PedroJ y Twitter: cuando el éxito cabe en 140 caracteres.

Nietzsche se sirvió de Zaratustra para poner voz, y cierta poesía, a sus temas recurrentes. Como un nuevo profeta que habla de cosas aún no conocidas y que necesitan de un altavoz potente para ser reveladas, Nietzsche pone en boca de su iluminado Zaratustra el advenimiento del superhombre, la muerte de Dios y el maleficio del eterno retorno de lo idéntico. Tres temas que, en definitiva, son un único asunto: la necesidad nitzscheana de proclamar lo que sólo él ve.

Zaratustra se agota en el intento. Los profetas deben dar su vida para que su mensaje cale hondo entre los hombres. Nietzsche, maestro de los aforismos y de la provocación, puso en boca de Zaratustra lo que llevaba en su corazón y en su atormentada mente. Zaratustra no es más que un instrumento en manos de su creador; un instrumento creado para dar voz a su mensaje. Zaratustra no es más que un mensajero. Ofrecido el mensaje, deja de ser necesario para su creador.

No sé que llevará PedroJ en su mente y en su corazón. Son asuntos suyos. Pero sí sé que es lo que contiene su Timeline de Twitter: -El Mundo-Orbyt, -su último libro “El primer naufragio” y –Humanidad, mucha humanidad. De la abundancia del corazón, habla la boca; por nuestras obras nos conocerán; o, dicho en un lenguaje más moderno: por nuestros twitters sabrán quiénes somos; de la abundancia del corazón, teclean los dedos sus twitters.

Llevo tiempo siguiéndole en Twitter. Hace poco, en una de sus numerosas conferencias, le escuché hablar sobre Twitter en Sevilla. Una frase que lanzó, buscando un titular como periodista de raza que es, me hizo pensar: Cada mañana me levanto pensando en Twitter.


Aventuro un proceso en el uso de las Nuevas Tecnologías por parte del director de El Mundo. Inicialmente, ve en Twitter una herramienta más para potenciar su periódico o su actividad profesional: Twitter, nuevo altavoz para vender sus productos. Como Nietzsche con su Zaratustra.

Le da resultado. Lo usa con ingenio y asiduidad. Sin embargo, descubre con los días, que detrás de sus twitters hay personas que le siguen, que comentan lo que él teclea, que responden con rapidez a cualquier asunto que plantee. Y PedroJ comprende que no puede hacer lo que hizo Nietzsche con su Zaratustra. Twitter deja de convertirse en mero altavoz para pasar a ser algo distinto. Y éste creo que es el éxito de PedroJ en Twitter.

Sin duda, gracias a Twitter conseguirá más suscripciones para su periódico online, o más ventas de su último libro. El negocio es el negocio. Nietzsche también escribía para vender. Pero el periodista no puede dejar de pensar en Twitter. Ha descubierto, y con él sus miles de seguidores, que detrás de las Nuevas Tecnologías, de sus miles de twitters, de su legión de lectores, hay personas. Y con las personas, lo único que cabe es comunicarse de tú a tú.

Creo que PedroJ es ejemplo de buen uso de las Nuevas Tecnologías. ¿Su éxito? Es humano, demasiado humano y, por tanto, honesto y natural. Y eso, engancha. Aunque sólo se disponga de 140 caracteres para mostrarlo.

2 comentarios:

  1. el exito se mide con las ventas, pero la relacion con las personas ofrece...un dia de campo abierto a las emociones!

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  2. Storytelling, gracias por tu comentario.

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